Imagenes del camino...

miércoles, 14 de enero de 2009

Cómo decirte no

Como decirte no
si se bien que estoy mintiendo
como decirte no
si eso no es lo que yo siento
como decirte no
y borrarte de mis sueños
como decirte no
y si te he visto no me acuerdo

como decirte no
si me bailas en los sesos
como decirte no
si te calaste hasta en mis huesos
como decirte no
y salirme de este infierno
como decirte no
y si te he visto no me acuerdo


y así hoy en la cola me acompañó Franco de Vita envenenándome la melancolía y dándole forma a esta enorme confusión que llevo por dentro desde hace tanto tiempo.
A veces me pregunto si el paso final que me falta para poder cerrar un capitulo ya oxidado de tanto pulirlo, es decir que SI para poder sentir que definitivamente es un NO.

Será que es verdad que un encuentro después de tanto tiempo de separación es lo que te permite sentir definitivamente que las cosas si han cambiado y que es hora de cerrar con broche de oro?

Me aterra ese encuentro tan solicitado y soñado. Me aterra pensar que me devuelva al pasado y me atrape nuevamente. Me aterra sentir que por decisión propia me estoy metiendo nuevamente en la boca del lobo... Esa boca que una vez que estás adentro, te hiere con los colmillos y te cura con la lengua...

Y para completar, este encuentro no seria un encuentro cualquiera... Porque la distancia que nos separa no se alcanza con gasolina sin plomo de 95 octanos... esta requiere de una gasolina un poco más sofisticada, un piloto de avión, una visa y unos dolares que probablemente el cupo de cadivi no logre cubrir... En otras palabras, una vez que cruce el continente para llegar, ya mis defensas están en mínimo, mi idioma solo en mi cabeza y el control..... bueno, ese ni se diga... perdido en la aduana y enterrado en mis abdominales contraidos...

Pero cómo decirte no, si eso no es lo que yo siento
y cómo decirte no, si se bien que estoy mintiendo...

miércoles, 7 de enero de 2009

Año Nuevo.. Vida Nueva!!

Constantemente me impresiono de cómo la vida insiste en mandarnos mensajes en los momentos más inesperados, y cómo, si logramos recibirlos y digerirlos, son capaces de darle un vuelco interesante y extraordinario a nuestras vidas.

Particularmente las últimas dos semanas del mes de Diciembre fueron sumamente estresantes para mi. No recuerdo haber tenido durante el año días con tanta tensión en el trabajo, con situaciones caóticas que se colaban una tras otra sin siquiera avisar... Días donde las 24 horas no eran suficientes para hacer todo lo que teníamos que hacer antes de culminar el año, además de los compromisos sociales y afectivos propios y no tan propios de la época de año...

Y justo en la cúspide de esos momentos, donde sólo me quedaba decidir qué hacer y qué dejar por fuera, con quién quedar bien y con quién quedar mal, a quién apoyar y a quién desilusionar por mi aparente falta de tiempo..., escuché las palabras casuales de una amiga que sin saberlo, no solo cambió mi estado anímico, sino que me dio también un claro propósito a seguir en este nuevo año.

Sus palabras fueron algo parecido a ...: "En estos momentos en los que te invade el estrés por lo que debes hacer y la culpa por todo lo que no te da chance de hacer, mi única recomendación es que hagas lo que hagas, te entregues por completo a eso que decidiste hacer sin sentirte mal por aquello que no hiciste y que pudieras estar haciendo en su lugar. Porque sea lo que sea que elijas, esa elección sale de tu corazón y merece tu propio reconocimiento y gratitud"

Y a pesar de quizás haber escuchado esas mismas palabras infinidad de veces en el pasado, esta vez curiosamente logré sentirlas e internalizarlas en cada una de mis células... y como por arte de magia entendí por primera vez lo que significa vivir el momento a plenitud sin quedarnos atrapados en el pasado o en el futuro.

Si tuviera que describirlo con palabras diría que si pones toda tu atención y toda tu intención en el momento en el que estás.. Si cada vez que un pensamiento de culpa se acerca lo dejas pasar por debajo de la mesa.. Si logras ver los detalles que te rodean, los colores, los olores, los sabores.. Si logras no estar tan pendiente de la hora .. Y si logras sonreír aunque estés sola y nada muy grandioso esté sucediendo.... Te darás cuenta cómo hay una fuerza interna que se va haciendo cada vez más grande, que te va llenando el pecho hasta sentir que no cabe dentro de ti y que va bajando tus pulsaciones e inundándote de un sentimiento inusual llamado PAZ...

Mis deseos, en este nuevo año que comienza, son que podamos tener la oportunidad y el privilegio de sentir esta sensación tan espectacular con mayor frecuencia y que aprendamos realmente a vivir en el ahora y disfrutarlo a plenitud... porque lo único que construimos es nuestro presente y es éste mismo el que nos da el poder de disfrutar la vida mientras la estamos viviendo.

Feliz año 2009 y muchas gracias por leerme!